Epidemia: Entrevista con Adrian Saba, director del film El Limpiador

Por Diego Mondaca

Nada mas grato que entrevistar a Adrián Saba, director de la laureada película El Limpiador. Al entrevistarlo llega a mi memoria aquel grato recuerdo de los "buenos" miedos que manifestaba Adrián, hace casi más de un año, cuando se encontraba a pocos días de embarcarse en el avión que lo trasladaría a San Sebastián Film Festival (2012), lugar que ahora es su bastión.

En una larga platica que sostuve con Adrián en aquel tiempo, en el aeropuerto de Bogotá, pude sentir los nervios, la ilusión y la incredulidad. La incertidumbre de ir a enfrentarse al mundo soñado. Sabemos que la vida se teje entre terquedades y buena fortuna, me parece que el joven Saba goza de ambas.

El Limpiador significa un excelente debut cinematográfico por su sobriedad, inteligencia y cuidado, pero más importante aún, por la fresca y puntillosa mirada con que logra construir la capital peruana "vacía".

Posar el lente en una ciudad como Lima caótica, abarrotada de comerciantes, carros y niebla es una gran reto, pero filmarla vacía, completamente vacía, es una terquedad que hay que atender. No solamente es mérito de la producción (Carolina Denegri) sino que también es una importante herramienta narrativa a través de la cual logramos enfocarnos en la amistad y los abismos de sus protagonistas. Sustraemos de todo el universo y el caos limeño a Eusebio (Víctor Prada) y Joaquín (Adrián Du Bois). A través de ellos no solo nos identifica y conmueve la amistad, sino también nos horroriza la soledad, pero también la indiferencia, retratada claramente a través del Dr. Lozada (Miguel Iza). Los personajes aparecen como pequeñas islas que se juntan en medio de una gran epidemia formando una especie de archipiélago conectado por aguas de soledad.

Con éstos elementos: la amistad (complicidad), la soledad, la indiferencia y la inocencia, partes quizás estructurales del ser humano, El Limpiador se convierte en un film intrigante y fiel a nuestro universo interior. Es, a partir de esas complejas líneas narrativas expuestas por el director con exquisito cuidado, que todo espectador, peruano o no, conocedor o no de la ciudad de Lima, participa y dialoga con la narración ayudada por la brillante fotografía de Cesar Fe.

Los silencios quizás en un principio predecibles, van cobrando sentido y cobrando un nuevo significado a medida que se desarrolla el filme. No es silencio, es soledad. Es conflicto, tensiones y dilemas internos de los personajes. Quizás la experiencia más dura en la película es la de Eusebio, quien se enfrenta diariamente a la muerte, por trabajo de médico forense, y que además lucha por salvar la vida, la de Joaquín, por amistad (complicidad) y amor.

Así, tras esta breve introducción los invito a leer la entrevista exclusiva con Adrián Saba con motivo de la presentación de su cinta El Limpiador en el 4to LAKINIO Film Festival.

LAKINO: ¿Cómo se genera esta idea de Epidemia?

Adrián Saba: La creación de una idea es un total misterio para mi, no parte de un momento singular si no de una acumulación de sensaciones, recuerdos, etc. Yo tenía ganas de crear un mundo con una epidemia misteriosa y mortal. Una epidemia que nunca se resuelva y que no sea el verdadero eje de la película, si no que funcione como contexto para que se desarrolle la historia. La idea de la epidemia fue la primera sensación que tuve en esta película, vino antes del personaje del limpiador forense, vino antes que el niño con la caja en la cabeza, vino antes que pensara en el equipo, los actores, la música, las imágenes, fue la primera sensación. Era un mundo, una circunstancia que me interesaba. Creo que vivimos en una época donde un brote epidémico no es algo totalmente fuera de contexto, y me imagino que se debe al maltrato que le damos al planeta tierra y nuestros propios usos de la tecnología y la ciencia. A veces siento que la madre naturaleza tiende a balancear las cosas, y a pesar de parecer enemigos, la vida y la muerte van de la mano y se dan sus debidos espacios cuando uno más lo necesita. A pesar de todo, creo que El Limpiador es una película sobre la vida.

LAKINO: El proceso, sus elementos técnicos, de filmación fue bastante austero. ¿Es ahí donde te forzaste a ser fiel a una sencillez y sobriedad?AS: Claro. Creo que el cine es una mezcla de lógica e imaginación. Tener los pies en la tierra pero a su vez poder volar. Hay que encontrar el balance entre estos dos. Y en nuestro caso, fue una película de muy bajo presupuesto al que se le adhirió un estilo visual y técnico que pueda ayudar a la producción sin dejar de contar la historia. Pocos planos, cámara fija, cero efectos especiales, pocos actores. A su vez, todos los elementos técnicos fueron claves para la narración ya que creo eran una extensión de la anatomía del personaje principal. Y si hubiera tenido 10 millones de dólares hubiera contado la historia de la misma forma.

LAKINO: Cuéntanos esos "pequeños detalles" que construyen y deslumbran con El Limpiador. Por ejemplo, la caja de cartón.

AS: En El Limpiador me gustaba buscar una estética visual distinta. Desde transformar Lima a mi gusto hasta ver a un niño caminando con una caja de cartón en la cabeza. Es importante para mi, buscar cierta frescura visual, algo fuera de lo común pero que en la película se vuelve común. Además, el niño tiene miedo que literalmente le caiga la muerte encima, por lo tanto busca formas de protegerse.

LAKINO: Es así como ves a tu ciudad, tu sociedad? o solo es una construcción fantástica?

AS: Construcción fantástica. No considero que soy una persona política ni tampoco mi interesa, por el momento, revelar realidades actuales ni formular ninguna crítica social o política... Me entusiasma mucho la idea de poder crear un mundo que uno mira por la ventana de la pantalla o el televisor y que por esa hora y media eres transportado a otro lugar. Eso es lo que me mueve: la posibilidad, no la realidad.

Éste es El Limpiador, un filme que tiene mas que ver con la condición humana. Espacios vaciados y chocantes, por que precisamente, no esperas que estén vacíos. Pero son así, no porque no haya gente, sino por que esa gente perdió su capacidad de conectarse la una con la otra y la otra con la otra y la otra…

Entrevista realizada para publicacion [IN SERT] durante el 2013 Lakino Film Festival (Berlin).

Foto: Escena de la pelicula El Limpiador, de Adrian Saba